viernes, 8 de julio de 2011

La lectura

Se abrió ante mí un nuevo libro,
de hojas canelas y suave cubierta
con finos adornos recubierta
y con márgenes en los que escribo.


Es una lectura sencilla, placentera
un libro que no provoca soltar,
y en sus bellas páginas volcar
la pasión que su letra me genera

Es un libro para amar, que se deja amar
un libro para aprender hasta lo que se sabe,
con un contenido (y qué duda cabe)
que mientras más lo lees, más me va a enamorar.

En sus páginas encuentro, bondad y poesía.
sensualidad reprimida y deseo desenfrenados
reflexiones y pensamientos encontrados,
también leo lo que fue y lo que sería.

El libro lleva tu nombre, nombre de bella mujer,
escrito con suspiros en lo suave de tu piel,
con sabor a miel dulce y pura, sin rastros de hiel,
para saborearlo todo, porque deleitarse es menester.

El prólogo es sobre amor, sobre amarte, en realidad
y describe con simpleza lo que te hace tan bella,
tema que queda muy claro, como la luna y la estrella,
es una invitación para leer en noches de claridad.

Es tu cuerpo ese libro, cuerpo de apredizaje,
que quiero leer, sin faltas, cada noche,
sin pausas, sin parar y sin reproche
y se he de viajar, llavarlo hecho amor en mi equipaje